SEMBLANZAS Y RESEÑAS
De las comunicaciones de los Ponentes y de lo vertido por los asistentes en los debates, el Comité Organizador ha extraído las siguientes conclusiones:
- La Psicología Clínica ha adquirido en los últimos 20 años una solidez y peso específico incontestable. Veinte Facultades y Secciones de Psicología en todo el Estado, cinco Comunidades Autónomas con Programas de Formación de Especialistas en Psicología Clínica, la presencia, aún insuficiente, pero muy importante de los psicólogos en el sistema sanitario público y el gran desarrollo profesional en el sector privado así lo confirman.
- Los psicólogos clínicos han configurado en la práctica un perfil que les define profesionalmente. El trabajo desarrollado en el diagnóstico, la intervención terapéutica en sus diversos modalidades, la rehabilitación, la prevención y promoción de salud, etc., ha definido un campo de trabajo dentro de la atención a la Salud que demuestra día a día su necesidad y eficacia y que es coherente con las concepciones defendidas internacionalmente desde organismos como la O.M.S.
- Durante todos estos años los psicólogos clínicos de la salud se han comprometido con estas concepciones progresistas que la Administración ha venido impulsando en nuestro país con políticos y planes de reforma sanitaria.
Señalamos la importancia del compromiso con concepciones interdisciplinares y de trabajo en equipo, si, como se reconoce en la Ley General de Sanidad, se mantiene la prioridad de atender la salud comunitaria de una manera integral.
Reclamamos, pues, la presencia, en los dispositivos de la red en los que aún no están presentes, de psicólogos clínicos que con la especificidad de sus funciones mejorarían la respuesta a la demanda asistencial en unidades de hospitalización breve, servicios de urgencia, programas de enlace e interconsulta hospitalaria, etc.
Los psicólogos clínicos sienten la necesidad, cada vez mayor, de desarrollar líneas de investigación básica y aplicada, para lo cual precisan de estructuras institucionales específicas en la red -sanitaria y que se propicie la conexión con la investigación universitaria.
Este proceso de consolidación profesional ha sido posible gracias a un importante esfuerzo de consenso entre instancias colegiales, universitarias y del mundo profesional público y privado. Hoy por hoy, los psicólogos que trabajan en el campo de la salud, se hayan condenados a padecer situaciones de interinaje y agravio comparativo que la Administración ha de paliar, reconociendo de hecho lo que aún no pueda reconocer de derecho (retribución como especialistas, autonomía profesional en la emisión de informes, prescripción de tratamientos y bajas laborales, acceso a puestos directivos ... ).
No es posible, pues, poner en duda el carácter sanitario de la Psicología Clínica y de la Salud; sin embargo, la puesta en marcha de los mecanismos administrativo-legales que permitan la institucionalización de este reconocimiento sigue posponiéndose, a pesar de las reiteradas promesas que se nos han hecho desde hace años y desde todos las instancias político-administrativas posibles.
Así, tres problemas, vitales para el conjunto de los psicólogos clínicos, siguen aún sin resolver:
Lo que significa que las administraciones contraten y convoquen plazas de psicólogos como personal sanitario facultativo asistencial especialista; e implica que todo la Administración reconozca que nuestro trabajo es una actividad sanitaria, como ya ha hecho el Ministerio de Hacienda para dar cumplimiento a la sentencia del Tribunal Supremo en el caso del I.V.A.
Dicho reconocimiento deberá tener el necesario refrendo legislativo por parte de las instancias competentes. (Ministerio de Sanidad y Consumo y Ministerio de Educación y Ciencia.)