EDITORIAL

 

 


La REVISTA DE PSICOLOGIA DEL TRABAJO Y DE LAS ORGANIZACIONES esté ya en tus manos. Se ha hecho de rogar y querer. Fue en la sesión de clausura del I Congreso de Psicología del Trabajo {Madrid, 9 de Abril de 1983) cuando el Secretario del Colegio Oficial de Psicólogos, Adolfo Hernández, lanzó en volandas la iniciativa. Era un propósito que acunaba una intención y una finalidad sentida como necesaria entre los asistentes.

Durante la celebración del II Congreso de Psicología del Trabajo (Terrassa, Marzo 1985) se consolidó la decisión de poner en marcha este proyecto. Hoy, este ejemplar que reclama tu atención, vocea que la idea se ha echado a andar de suerte que la Revista anunciada cobra forma y figura a través de estas páginas.

Esta Revista nace impulsada por el Colegio Oficial de Psicólogos, Delegación de Madrid. Era una necesidad enunciada en variadas conversaciones con gran asiduidad. La Sección de Psicología Industrial de la Sociedad Española de Psicología también rondaba el tema. De ahí que el acuerdo de sacar adelante esta Revista fuera el fruto inmediato del intercambio y colaboración inherente y preceptivo entre profesionales de la Psicología del Trabajo y de las Organizaciones. Su financiación inicial se surte de los fondos remanentes de la celebración del I Congreso.

¿Cuáles son los objetivos que se persiguen con la entrada en circulación de esta nueva Revista? Por mor de la brevedad se citan los siguientes:

1 Brindar un marco físico de encuentro y cita periódica entre los profesionales, que sirva de nexo de comunicación permanente entre congresos.

2. Propiciar un cauce pare la identificación y cohesión profesional. Cada psicólogo trabaja en una empresa o entidad donde sus cometidos y funciones están claramente supeditados a las demandas y problemas que le vienen planteados. Es un profesional que opera en solitario en numerosas ocasiones y circunstancias. Su identidad la establece el puesto. Esta Revista se propone fomentar la configuración de una identidad cuyo protagonismo y dirección corresponde a los propios profesionales.

3. Dar pie a una aproximación entre profesionales en función de la similitud de tareas y problemas que se abordan. Quienes se ocupan de asuntos afines tendrán, así, forma de ponerse en contacto pare poder interactuar e intercambiar la información y experiencias que les son pertinentes.

4. Facilitar la difusión de eventos y actividades (formales e informales) que tengan relevancia en el contexto de la profesión, tales como Congresos, Simposiums, Seminarios, Encuentros, Talleres, Publicaciones, Convocatorias, etc...).

5. Dar cabida a una estructuración más especifica de esta profesión en el seno del Colegio Oficial de Psicólogos (para la delimitación de áreas de especialización y pare la creación de comisiones de trabajo monográficas) y la Sociedad Española de Psicología.

6. Hacer posible la consolidación de un adiestramiento integrado y especifico, dada la actual desconexión entre la enseñanza recibida en la Universidad y las demandas explícitas de los puestos de trabajo que engarzan esta profesión. La posible homogeneidad, en el momento presente, viene dictada más por la comunidad de lecturas efectuadas que por haber recibido una enseñanza y disciplina concreta en esta área durante los estudios universitarios.

7. Servir de foro para las inquietudes, pluralidad de enfoques, diversidad de técnicas y procedimientos de actuación, gama de criterios de rendimiento y eficacia, variedad de fórmulas de contrato y status profesional, etc... De esta manera otros psicólogos del trabajo y las organizaciones se convierten en grupo de referencia con vistas a evaluar y sopesar el ejercicio profesional propio.

8. Informar sobre posibilidades de becas, cursos de formación de postgrado dentro o fuera de España, medios para movilizar recursos financieros que fomenten la especialización en Psicología del Trabajo y de las Organizaciones, modalidades de contrato en práctica, etc... en la medida que se vayan haciendo accesibles y disponibles.

9. Tomar el pulso a la demanda social de psicólogos del trabajo y de las organizaciones, sacando a relucir nuevas áreas, temas, problemas, tipos de intervención, etc... que puedan desembocar en contratos temporales o permanentes.

10. Hacer posible la realización de trabajos de investigación conjunto bien entre psicólogos de distintas empresas bien entre psicólogos de distintos países que estén ocupados en un asunto común. Se cuenta para ello con varios puntales de apoyo:

a) Los miembros del Consejo Editorial, constituidos por profesionales y profesores universitarios que, desde hace años vienen dedicando su atención a este área de especialización.

b) La Red Europea de Psicólogos del Trabajo y de las Organizaciones (European Network of Organizational Psychologists -ENOP-) cuya última sesión tuvo lugar en el marco del II Congreso de Psicología del Trabajo.

C) La Conferencia de Psicólogos de las Organizaciones en Europa Occidental (Western European Conference of Organizational Psychology) cuya última sesión se celebró en Aagen este año y la próxima está prevista para 1987 con la plausible participación del Colegio Oficial de Psicólogos entre los co-organizadores.

d) Contactos establecidos con otras Asociaciones como la International Association of Applied Psychology y La Sociedad Interamericana de Psicología, así como otras asociaciones de rango nacional en otros países europeo centradas en Psicología del Trabajo o de las Organizaciones.

11 . Coadyuvar a que se genere un sistema de reglas y normas de funcionamiento general que regulen, en cierto modo, las pautas habituales del ejercicio profesional y que permitan preservar los derechos y enfoques propios de la posible arbitrariedad o demandas injustificadas por parte de empresas o clientes.

12. Incentivar la convergencia de las distintas áreas de conocimientos que caracterizan hoy la Psicología en la Universidad Española en lo que tienen que ver y aportar al desempeño profesional coherente y global en Psicología del Trabajo y de las Organizaciones. No se trata de recaer en el enfoque tradicional de una psicología aplicada entendida como una mera extensión de principios y conocimientos académicos consolidados a los problemas que plantea el ámbito laboral. Se trata de retomar los enfoques teóricos y metodológicos de la Psicología Básica, de la Psicología Diferencial, de la Psicología Social, de la Psicología Evolutiva y de la Educación, de la Evaluación y Tratamientos psicológicos, de la Psicobiología, de la Psicología Experimental, de la Psicología Cognitiva, de la Psicología de la Personalidad, etc... para entroncarlos en una programación e intervención profesional de amplio espectro en el ámbito concreto que configura el mundo del trabajo y de las organizaciones.

13. Avanzar en el propósito de generar una Psicología plasmada en estrecho contacto y análisis de los temas y de las tesituras que marcan y pautan las circunstancias reales de nuestro ambiente y cultura laboral específica. Hasta ahora ha primado la importación de teorías y modelos a los que se ha incorporado e infligido la consiguiente transformación más bien operativa. Importa, pues, cosechar enfoques y datos enraizados en el medio efectivo de nuestra sociedad, cuyos problemas reclaman una respuesta y aportaciones pensadas y desarrolladas desde ellas y hacia ellas, sin caer en la "adhocracia".

Con vistas a cubrir estos objetivos la estructura inicial de la revista es harto concisa, pero suficiente en una primera etapa. Se abren tres secciones fijas: artículos, experiencias, recensiones. En la primera tienen cabida trabajos redactados con un lenguaje más formal y académico y que aborden monográficamente un tema. La segunda recogerá informes de investigaciones o experiencias realizadas en el contexto de una entidad, dando lugar a la utilización de un lenguaje más descriptivo y genérico. La tercera dará acogida a información circunstancial relevante, reseña de libros, mención de legislación o normativas de interés, informes sobre la psicología del trabajo y las organizaciones por países, información breve sobre actividades o asuntos de interés para el desarrollo de la profesión, anuncios, etc...

Durante el año 1985 está prevista la aparición de dos números. A partir de 1986 la periodicidad será cuatrimestral, es decir, tres números al año. El Director de la Revista cambiará cada tres años.

A través de las páginas de esta Revista puede establecerse una red de comunicación entre los profesionales que permita nuevos tipos de eficacia y satisfacción. Ni el Director ni el Jefe de Redacción pretenden ejercer de cancerberos que controlen los mensajes que puedan fluir por este canal de comunicación. Aún cuando haya sobrecarga su cometido es bien distinto. Se proponen servir de intermediarios con la mira en conectar las distintas vertientes de la profesión que deseen utilizar este canal de comunicación. El Comité de Redacción y el Consejo Editorial han sido pensados para que sirvan de engarce en los distintos ambientes geográficos e institucionales en que se practica la profesión para que ejerzan ahí un papel limítrofe. Los textos que se reciban serán a su vez distribuidos para que sean escudriñados al menos por dos expertos que den su informe favorable. De esta suerte, la Revista de Psicología del Trabajo y las Organizaciones cosechará, progresivamente, un rigor imprescindible para que pueda convertirse en una fuente de consulta solvente que refrende un cierto liderazgo de opinión en el seno de la profesión.

Se invita, pues, a los profesionales, profesores universitarios, postgraduados e incluso estudiantes a embarcarse en este empeño con la remesa de escritos y textos que entiendan pueda tener audiencia en este nuevo foro. Los verdaderos promotores de esta Revista son sus lectores y autores.

En el marco cultural de habla hispana sólo existe en la actualidad una `publicación que cubra un área de contenido afín: es la Revista Interamericana de Psicología Ocupacional editada en Colombia desde hace poco más de tres años.

A raíz del Primer Congreso Interamericano de Psicología del Trabajo que se celebró en marzo del presente año, quedó clara la conveniencia de confluir en actividades y asuntos que puedan ser de interés compartido con esta vertiente de la profesión. Se vio, asimismo la oportunidad de planificar la puesta en marcha de un Primer Congreso Interamericano de Psicología del Trabajo y de las Organizaciones, previsto para la primavera de 1988 y cuya sede sería, precisamente, Madrid. De esta manera tendría lugar la puesta en común de tareas e ideas que sirvieran de punto de encuentro y trampolín de relanzamiento de esta especialidad.

Por ello, estas páginas están abiertas, pues, a la colaboración de los autores latinoamericanos que deseen actuar de adelantados en esta cita que está concertada a un plazo anunciado de antemano. Desde su carta de presentación, la Revista de Psicología del Trabajo y de las Organizaciones, invita a la realización de este proyecto que convoca a la participación. Sus páginas quedan abiertas para quien quiera hacer uso de ellas, leyendo o escribiendo. Cada cuatro meses, se propone ser una cita obligada para los profesionales y universitarios interesados en la aportación psicológica a los problemas y retos que tiene planteados el mundo del trabajo y de las organizaciones.