EXPERIENCIAS
A. INTRODUCCION
- B.1. Habilidades comunicativas para las relaciones personales (HASCOREP)
- B.2. Asesoría de estudios y profesiones
- B.3. Programa de Orientación e Inserción Socioprofesional
- B4. Servicios Sociales
C. EVALUACION D. CONCLUSIONES Y SUGERENCIAS
El motivo del presente artículo es transmitir la experiencia de formación en practicas de 47 estudiantes de psicología. futuros profesionales, que durante el curso académico 1992-93 se ha desarrollado en distintos servicios del Ayuntamiento de Parla, concretamente en la Delegación de Servicios Sociales, la Delegación de Educación y la Delegación de Juventud. Dicha experiencia ha sido posible, ante todo, gracias al buen hacer de los responsables de las dos instituciones implicadas directamente: la Facultad de Psicología de la U.C.M. (Departamento de Psicología Social, asignatura de Psicología Comunitaria) y el ya citado Ayuntamiento; buen hacer que da lugar al "Convenio de Colaboración Interinstitucional para la Formación de Alumnos en Prácticas". Las ventajas para ambas instituciones son fácilmente comprensibles: la Universidad encuentra un ámbito de la realidad donde posibilitar el que sus alumnos adquieran una formación práctica imprescindible y tan demandada por estos últimos; el Ayuntamiento recibe un apoyo sin el cual sería mucho más costoso ofrecer al ciudadano las prestaciones que día a día se hacen precisas. Y a todo ello hay que añadir el beneficio que esta colaboración entre lo académico y lo real supone a largo plazo para todos: que los profesionales de la psicología sean cada día más capaces y eficientes.
Dentro del marco que constituye el "Convenio de Colaboración Interinstitucional para la Formación de Alumnos en Prácticas" existe otro elemento importante: los/as coordinadores/as de prácticas (dos psicólogas en la Delegación de Juventud, una psicóloga en la Delegación de Educación y un psicólogo en la Delegación de Servicios Sociales), autores de este artículo. Su figura viene determinada por la necesidad de establecer una relación permanente entre la Facultad y el Ayuntamiento, así como la de coordinar y poner en marcha proyectos concretos. Sus funciones son fundamentalmente de tres tipos:
1. Las relativas al servicio:
2. Las relativas a la institución académica:
3. Las relativas a los/as alumnos/as:
- Programación, ejecución y evaluación de seminarios de formación para los alumnos:
- Sobre el servicio en que van a trabajar.
- Sobre el programa específico en que participan (con elaboración de la documentación y bibliografía pertinentes).
- Sobre otros proyectos que para los/as alumnos/as sean de interés aunque no hayan podido participar en ellos.
- Coordinación y formación del equipo de intervención, incluyendo:
- Diseño de los proyectos (en la medida en que estos lo permitan).
- Entrenamiento en tareas de ejecución y evaluación.
- Evaluación y seguimiento del trabajo de los/as alumnas/os. Certificados de prácticas.
Con todo lo anterior tenemos ya las bases sobre las cuales se articulan las actividades a las que vamos a hacer referencia. Antes de entrar en ellas en mayor detalle, consideramos necesaria la mención de un paso previo: la presentación de las prácticas en la facultad. Esta se realiza en uno de los primeros meses del curso y supone el primer contacto entre los alumnos y los diferentes servicios en que van a tener la posibilidad de trabajar, con sus proyectos respectivos. Sobre la necesidad de este paso en la ejecución de un programa de prácticas del tipo aquí presentado insistiremos en el último apartado. Además un momento subsiguiente al anterior es el proceso de selección de alumnos para los servicios y proyectos ofertados. Esta suele hacerse necesaria a causa del mayor número de alumnos que de plazas disponibles.
Asimismo, todos los proyectos comienzan con un período de formación cuyo contenido varía según los mismos. Esta es considerada como una de las fases imprescindibles para la puesta en marcha de los proyectos. Por otra parte existen objetivos comunes en todos los servicios para todos los alumnos en prácticas:
Los aspectos específicos de cada servicio se resumen brevemente a continuación
Los servicios y proyectos en los que intervinieron los alumnos en prácticas fueron:
Este proyecto se ofrece desde la Delegación de Juventud a todos los centros de Enseñanzas Medias de Parla.
Se pretende proporcionar a los/as jóvenes un espacio dentro de su horario lectivo en el que ellos/as puedan "hablar de sus cosas" y practicar otros modos de abordar la comunicación.
Los objetivos generales que el proyecto pretende para los/as alumnos/as de los institutos son:
La intervención es realizada con grupos de entre 15 y 20 jóvenes en el horario reservado para la asignatura de Etica o Religión. Cada grupo es llevado por dos dinamizadores/as, que son los alumnos/as de 5.º curso de la asignatura Psicología Comunitaria de la Facultad de Psicología (U.C.M.). En total han colaborado 24 alumnas/os (por lo tanto, se ha intervenido en 12 grupos de jóvenes).
Además de los objetivos comunes a todos los/as alumnos/as especificados en la introducción) este proyecto se traza otro objetivo más:
- Adquirir habilidades básicas para la dinamización de grupos, el uso de técnicas participativas y de comunicación, el entrenamiento en habilidades sociales y el trabajo en equipo.
Antes de comenzar la intervención los/as estudiantes de Psicología reciben un curso de formación de dos meses de duración (noviembre y diciembre) en el que se pretende prepararlos para la tarea de dinamizar, considerando esta preparación tanto personal como profesionalmente. Aparte de la preparación recibida en técnicas de dinamización y habilidades de comunicación, es importante señalar que los/as dinamizadores/as abordan en este período los mismos centros de interés que se van a trabajar luego con los/as jóvenes: amigos/as, pareja y familia.
Pasado este período de formación (enero) comienza la intervención en los centros de Enseñanzas Medias, que se prolonga hasta el mes de mayo.
Durante este tiempo, el equipo de dinamizadores/as sigue funcionando como tal, manteniendo reuniones conjuntas de formación, seguimiento y coordinación. Se realizan también diferentes evaluaciones de proceso.
Al finalizar la intervención se realiza una evaluación final que consiste en recoger información cualitativa y cuantitativa de las diferentes partes implicadas en el proyecto: profesores/as de los institutos, jóvenes, dinamizadoras/es y coordinadoras. Los resultados de estas evaluaciones y de todo lo que ha ido aconteciendo a lo largo de la intervención se recoge en una memoria final. Las propuestas de cambio que surgen en toda la evaluación nos sirven para incorporarlas al proyecto e ir adaptándolo lo más posible a las necesidades reales tanto de los/as estudiantes de Psicología en prácticas como de los/as alumnos/as de los institutos que se benefician de esta intervención, como de los/as profesores/as que nos facilitan la puesta en marcha de este proyecto. En definitiva, se pretende hacer una intervención que esté cada vez más adaptada al entorno en el que se desarrolla.
Este proyecto se realiza desde la Delegación de Juventud del Ayuntamiento de Parla. Este año la intervención ha sido realizada por dos alumnas que cursaban la asignatura de Psicología Comunitaria.
El proyecto de la Asesoría de Estudios y Profesiones partió con unos objetivos concretos establecidos previamente. Estos fueron:
El proyecto ha estado compuesto por cuatro fases diferenciadas que se han realizado paralelamente durante todo el año. Estas fases han sido:
Antes de comenzar en enero estas fases, se realizó en la facultad un período de formación con las alumnas en prácticas en el que se las preparó para las diversas tareas que iban a desempeñar para la puesta en marcha del proyecto.
En estas sesiones se desarrollaron habilidades personales para la atención individualizada que iban a prestar a las personas que utilizaran la Asesoría de Estudios y Profesiones.
También se trabajó otra parte fundamental para poder enfrentarse a un usuario/a, como es el conocimiento de toda la documentación que puede ser utilizada en un servicio como este. Esta es muy importante, ya que de ella depende la fiabilidad y la claridad de la información suministrada. Este trabajo también proporcionó un mayor nivel de seguridad a las asesoras.
De enero a junio, las alumnas desarrollaron las cuatro fases del proyecto manteniendo un contacto directo con la coordinadora como apoyo para su continua formación, supervisión de las tareas y seguimiento de cada una de las fases.
Al finalizar en junio las prácticas se efectuó una evaluación a las alumnas en prácticas. En esta evaluación se obtuvieron resultados muy positivos como muestran los datos del apartado correspondiente.
Todos los datos recogidos durante el año y todas las conclusiones quedan recogidas en la memoria de la Asesoría de Estudios y Profesiones. En la misma aparece un estudio exhaustivo de las demandas llegadas a la Asesoría y se analizan los siguientes aspectos:
Todos estos datos nos dan la oportunidad de conocer mejor las necesidades de la población que es atendida para seguir mejorando el servicio y adecuándolo más y mejor a las necesidades de la población.
El Programa de Orientación e Inserción Socioprofesional que se ha desarrollado en el curso 92/93 desde la Delegación de Educación, ha tenido como objetivos generales los siguientes:
Este Programa se divide en tres proyectos que son los siguientes:
La puesta en marcha de dichos proyectos fue realizada por un equipo de trabajo formado por 6 alumnos/as de 5.- curso etc. Psicología Comunitaria y una psicóloga coordinadora. La participación del equipo no fue en todos los proyectos la misma. En el Proyecto de Información y Orientación a alumnos/as de 8.º, la colaboración de los/as alumnos/as en prácticas se limitó a la participación en las sesiones de formación a los tutores, no existiendo ningún tipo de seguimiento posterior. Sin embargo, el desarrollo del Proyecto de Detección de Sujetos Inactivos y la puesta en marcha del Taller de Orientación Socioprofesional, fueron tareas totalmente asumidas por dicho equipo.
Las funciones del equipo de trabajo fueron variando a lo largo del tiempo pasando por diferentes etapas:
1ª Etapa: Formación (enero-Febrero)
Se realizaron 6 sesiones de formación, de 4 horas cada una de ellas, en las que a través de técnicas grupales se trabajaron los siguientes aspectos: características del entorno (recursos, población, etc.), características de la población de intervención, entrenamiento en los instrumentos de evaluación de los diferentes proyectos, conocimiento de los diferentes recursos existentes tanto formativos como laborales, etc.
2ª Etapa: Coordinación y Evaluación (marzo-abril)
Las reuniones tenían como objetivo prioritario el seguimiento del trabajo que se iba realizando en el Proyecto de Detección de Sujetos Inactivos, para así poder realizar las correcciones oportunas y poder detectar las necesidades que los jóvenes inactivos podían demandar. Gracias a este tipo de trabajo se pudo detectar la necesidad de crear un taller de orientación que ayudara a los jóvenes a tomar decisiones respecto a su futuro profesional.
3.ª Etapa: Diseño, Intervención y Evaluación (abril-mayo)
El trabajo realizado a lo largo de estos meses se centró exclusivamente en el Taller de Orientación Socioprofesional, abordando en estas reuniones la evaluación continua de las sesiones y la reprogramación de las mismas.
En la última sesión del equipo de trabajo, los/as alumnos/as en prácticas evaluaron éstas. Los resultados se muestran en el apartado siguiente.
Antes de finalizar con la exposición de este Programa, queremos señalar que la continuidad de las reuniones del equipo de trabajo, la metodología empleada y 1 motivación de todos los integrantes del equipo, han sido algunas de las claves del éxito del mismo.
En SS.SS. contábamos con 15 alumnos, distribuidos en seis proyectos de la siguiente manera:
Acorde con la estructuración del centro de SS.SS., cada uno de ellos se adscribía a una unidad. Así, los dos primeros dependían de la Unidad de Apoyo Técnico, el tercero de la Unidad de Drogas, y los tres restantes de la Unidad de Proyectos. Igualmente, cada uno tenía un profesional responsable de su ejecución, con la colaboración del coordinador de prácticas.
Cada proyecto cuenta con sus propios objetivos, entre los cuales cabe destacar aquí los de formación de alumnos. Tres de ellos, comunes a todos los servicios, aparecen en la introducción. Los específicos de SS.SS. son en buena parte iguales en los seis proyectos:
- Dar a conocer a los alumnos el centro de SS.SS., su organización y el trabajo de sus profesionales.
- Formar a los alumnos en materia de planificación (diseño, ejecución y evaluación de proyectos).
- Dotarles de las habilidades específicas a poner en juego en la ejecución de cada proyecto.
Como puede verse, el último es el único objetivo que toma distinta forma según el proyecto de que se trate. En un caso, serán técnicas de investigación social las puestas en juego, en otros la formación hará referencia a técnicas grupales, etc.
También en cuanto a sus fases y temporalización existen aspectos comunes a todos los proyectos: una fase previa de formación teórica y documentación, y una final de evaluación de prácticas. La primera de ellas se materializa en las siguientes actividades:
- Seminario de formación sobre SS.SS. Impartido por profesionales del centro. Recoge los siguientes temas:
- Seminarios de formación sobre planificación Impartidos por los diferentes profesionales responsables de cada proyecto y por el coordinador de prácticas.
- Formación y documentación teórica sobre el proyecto en que el alumno va a participar.
Todo ello se lleva a cabo entre noviembre y enero (existen variaciones en el momento de incorporación plena de los alumnos según los tiempos de cada proyecto). El paso que sigue es ya el de ejecución, con la formación práctica y el seguimiento constante necesario, a cargo de nuevo del responsable del proyecto y el coordinador de prácticas.
Finalmente, la otra fase común citada anteriormente es la evaluación de prácticas, con un cuestionario preparado al efecto, Y a cuyos resultados nos referimos en el siguiente apartado de este artículo.
Cabe destacar otro dato de interés: en SS.SS. también realizaban prácticas alumnos de Trabajo Social, y en algunos proyectos (los tres citados en último lugar), el equipo estaba compuesto por un alumno de cada disciplina. Ello posibilita el contacto entre futuros profesionales que posiblemente habrán de compartir un ámbito de actuación y coordinar sus intervenciones. Las ventajas y el enriquecimiento que ese contacto supone a la hora de optimizar la labor de este tipo de servicio son evidentes para todos.
Los datos que presentamos en este apartado se obtuvieron a través de un cuestionario de evaluación de prácticas que fue contestado por los/as alumnos/as al finalizar su período de colaboración. Dicho cuestionario constaba de cuatro dimensiones de evaluación:
C.1. Organización.
C.2. Coordinador/a.
C.3. Autoevaluación de los/as alumnos/as.
C.4. Prácticas de Psicología Comunitaria
Cada una de ellas recogía una serie de aspectos relacionados a valorar en una escala de 1 a 7 puntos (donde 1 representaba la valoración más negativa y 7 la más positiva).
Recogía los siguientes aspectos:
Hemos hallado la media de las puntuaciones en esos aspectos para cada uno de los servicios. Con ello llegamos al cuadro 1 donde, como puede observarse, quedan reflejadas en los cuatro casos valoraciones que podemos considerar positivas. A su vez, la media resultante total (5,57), de mayor interés a los efectos de este artículo, refleja la satisfacción de los alumnos con la organización de las prácticas. Resulta interesante también mencionar los aspectos que en algún caso específico obtuvieron puntuaciones más bajas (aunque no hayamos presentado los datos a un nivel tan detallado). Fueron "presentación y selección" y "horario y tiempos"; sobre el primero, decir que el dato puede ser interpretado como un índice de su importancia; sobre el segundo comentar que es conveniente llegar a acuerdos explícitos en torno a los horarios, tiempos de dedicación por semana, etc.
Los aspectos que recoge esta dimensión son:
Como en el caso anterior, presentamos ahora en el cuadro 2 las medias en esta dimensión según los diferentes servicios. Se observa de nuevo una valoración que en algunos casos incluso se acerca al máximo, y en general mantiene un nivel más que aceptable. La labor de los coordinadores de prácticas ha resultado positiva para los/as alumnos/as en todos los aspectos. Destaca sobre todo el papel organizativo que la presencia del coordinador/a supone para la realización de la actividad (la media en este aspecto es de 6,5).
En esta dimensión se recogen aspectos en los que los alumnos juzgan su propio trabajo:
En el cuadro 3 aparecen los resultados obtenidos en esta dimensión. Los alumnos evalúan de un modo positivo su propio trabajo, juicio que los coordinadores de prácticas corroboramos en todos los casos. Creemos que fomentando la implicación y la responsabilidad de los/as alumnos/as mediante la integración efectiva en un equipo de trabajo y la definición explícita de sus funciones, su participación en intervenciones como las aquí comentadas pueden ser muy provechosas.
Finalmente, la última dimensión de evaluación pide una opinión general sobre las prácticas a través de:
Colaboración interinstitucional para la formación de profesionales
Las medias de estas cuatro valoraciones según los diferentes servicios aparecen en el cuadro 4, donde se aprecia una vez más que, pese a las dificultades que siempre pueden surgir en una actividad como ésta, la satisfacción de los/as alumnos/as con el trabajo y la formación desarrollados es muy elevada. Cabe destacar como ítem más puntuado el que compara estas prácticas con el resto de las realizadas a lo largo de la carrera (la puntuación media en él es de 6,5). Todo parece indicar que con este tipo de convenios, mediante la inclusión de alumnos/as en servicios y proyectos, éstos tienen la oportunidad real de formarse.
Esta afirmación queda apuntalada con los resultados de dos preguntas también presentes en el cuestionario:
- Si te ofrecieran participar en un proyecto similar, ¿volverías a participar?
Sí 95% de los/as alumnos/as.
- ¿Aconsejarías a algún colega que participase?
Sí 100% de los/as alumnos/as.
A la vista de los resultados obtenidos apuntamos:
- La satisfacción de todos los/as alumnos/as.
- El cumplimiento de los objetivos de la Universidad: acercar al alumno al mundo profesional en el que se va a desarrollar su futura actividad.
- El beneficio obtenido por el Ayuntamiento al poder poner en marcha nuevos proyectos y ampliar los ya existentes, lo que se traduce en una mejora del servicio y una reducción del índice coste-beneficios.
Esto ha sido posible gracias a:
Por todo lo dicho a lo largo de este artículo sugerimos que para la puesta en marcha de este tipo de convenios se tenga en cuenta:
Por último y basándonos en nuestra experiencia, nos gustaría sugerir la generalización de esta práctica colaboradora a otras facultades, departamentos e instituciones.