EXPERIENCIAS

 

Intervención comunitaria en una institución penitenciaria brasileña


Community intervention in a brazilian penitentiary

Nadia JAMARD ALFONSO

Jorge S. LOPEZ MARTINEZ

Departamento de Psicología Social y Metodología. Facultad de Psicología universidad Autónoma de Madrid. Cantoblanco.


I. INTRODUCCION

II. FUNDAMENTACION DE LA INTERVENCION PSICOSOCIAL EN INSTITUCIONES PENITENCIARIAS EN BRASIL

III. ANALISIS DE NECESIDADES REALIZADO EN LA CARCEL MUNICIPAL DE PELOTAS

IV. DISEÑO E IMPLANTACION DEL PROGRAMA

V. EVALUACION DE LOS RESULTADOS

VI. CONCLUSIONES

BIBLIOGRAFIA


I. INTRODUCCION

En el marco del convenio de colaboración entre la UAM. y Universidades del Cono Sur, se vienen promoviendo desde el año 1990 diversos programas de desarrollo comunitario en algunas ciudades del sur de Brasil (estado de Río Grande do Sul).

La presente comunicación expone el programa de intervención psicosocial diseñado e implantado en la Cárcel Municipal de la ciudad de Pelotas durante el año 91/92, organizado por alumnos de tercer cielo de la Facultad de Psicología de la UAM. en colaboración con el ViceRectorado de Comunidad y Extensión de la Universidad Católica de la mencionada ciudad brasileña (UCPel). En esta intervención, tomaron parte además profesores y alumnos de las facultades de Psicología, Servicio Social e Ingeniería Agrónoma de la UCPel voluntarios, alumnos de las facultades de Historia y Educación Artística de la Universidad Federal de Pelotas, y diversas entidades públicas y privadas de la ciudad, estando prevista la integración progresiva de otras facultades y organismos.

 

II. FUNDAMENTACION DE LA INTERVENCION PSICOSOCIAL EN INSTITUCIONES PENITENCIARIAS EN BRASIL

Debido a la grave carencia de recursos materiales, económicos y organizacionales, la intervención sobre las conductas desadaptadas se realiza con una casi absoluta prevalencia de los aspectos judiciales, tornándose las instituciones encargadas de esta intervención verdaderos agentes de control y represión social. Esto es todavía más palpable en el ámbito penitenciario, en el cual las instituciones se estructuran en función de aspectos reglamentares y de seguridad, relegando a un plano secundario -o incluso suprimiendo- la intervención rehabilitadora, teóricamente determinada por la legislación brasileña (Ley n.º 7.210 del 11/7/1984, o Ley de Ejecución Penal -LEP- en sus artículos 10 a 37, del Código de Proceso Penal Brasileño).

Este énfasis en la seguridad en detrimento de la rehabilitación, vehiculado mediante el rígido control de la vida de los reclusos, hace de la cárcel (institución de partida "anormalizadora", sólo por el hecho de ser un ambiente estanco, una "Institución total", Valverde 1988) un elemento estimulador y modelador de conductas violentas, lo que contribuye significativamente a la anormalización progresiva del comportamiento, en el sentido de favorecer la producción y cristalización de alteraciones que se toman adaptativas en esa situación ambiental, en tanto que absolutamente inadecuadas para la vida en sociedad.

La realidad del sistema penitenciario y las consecuencias sufridas por los individuos sometidos a él -y esto partiendo de la consideración de que no sólo los presos sino también los funcionarios penitenciarios son individuos que sufren las consecuencias de este sistema- contrasta fuertemente con los objetivos teóricos del internamiento en instituciones penitenciarias, regulados por la legislación brasileña.

"La asistencia al preso y al interno es un deber del Estado, debiéndose realizar con el objetivo de prevenir el crimen y orientar el retmo a la convivencia en sociedad". (Ley de Ejecución Penal brasileña, art. 10.)

En la actualidad, la "asistencia" al recluso en las cárceles brasileñas se encuentra en la siguiente situación:

Con el fin de introducir, en la medida de lo posible, la "asistencia" material, sanitaria, jurídica, educativa, social, religiosa, psicológica y a la reinserción (LEP, arts. 10 a 43) que transformen las instituciones penitenciarias en lugares más próximos al modelo de instituciones rehabilitadoras, y sin perder nunca de vista la adecuación que todo cambio debe tener a la realidad concreta donde se pretende introducir y los recursos de los que se dispone, quedan fundamentadas las intervenciones psicosociales en contextos penitenciarios, dentro de las que se incluye el programa que presentamos a continuación.

 

III. ANALISIS DE NECESIDADES REALIZADO EN LA CARCEL MUNICIPAL DE PELOTAS

En el mes de noviembre de 1991, con el fin de organizar una intervención que significase la apertura de un campo de prácticas para alumnos de la UCPel y que al mismo tiempo promoviese la participación de diversas entidades de la comunidad, se inició el proceso de análisis de necesidades del "Presidio Municipal de Pelotas". El curso del diagnóstico fue interrumpido en diciembre de 1991 por la administración del centro, alegando que suponía un factor de disturbio para el orden interior de la institución.

Por otra parte, el Ministerio Público, a través del Fiscal General del Estado, solicitó a la ViceRectora de Comunidad y Extensión de la UCPel, la contribución de la comunidad universitaria en la mejora de las condiciones psicosociales de la Cárcel Municipal de la ciudad.

Al estar ya perfiladas las líneas generales del diagnostico, se presentaron los resultados del trabajo a la UCPel y, a través de diversos contactos con el Ministerio Público y con la administración de la Cárcel, fue posible la firma de un convenio de colaboración, estableciéndose el "Presidio Municipal de Pelotas" como campo de prácticas para los alumnos de la UCPel. En el mes de marzo de 1992 se completó el proceso de diagnóstico de la institución.

El programa de intervención que se relata se desarrolló en el período de marzo a diciembre de 1992. En la actualidad dicho programa continúa desarrollándose bajo la coordinación de técnicos locales.

Metodología utilizada en el proceso de recogida y evaluación de datos

Preferentemente cualitativa, complementada con análisis de datos cuantitativos.

Técnicas de evaluación

I. Resultados obtenidos

1.A Descripción de la institución

Espacio físico

La Cárcel Municipal de Pelotas está situada en un barrio periférico de la ciudad. Se trata de una edificación antigua (unos 25 años de antigüedad). Consta de: 2 galerías, donde se alojan los presos en régimen cerrado en celdas de 15 m2, un patio central, un área de alojamiento de presos en régimen abierto y semi-abierto, un área donde el equipo técnico atiende a los internos, un área administrativa, y un área circundante (que incluye una pequeña huerta). Existen, además, dos aulas y un taller de pintura.

En su origen, esta prisión estaba destinada a la reclusión de presos del municipio de Pelotas, pero en la actualidad alberga presos procedentes de diferentes partes de la Región.

Lindando con el muro oeste del patio se encuentra un edificio en construcción destinado a ampliar la capacidad del centro, cuyas obras, en el momento de iniciar el diagnóstico llevaban ocho meses paralizadas por falta de financiación por parte del Gobierno Estatal,

Características de la población de reclusos

Esta institución alberga presos en régimen cerrado, semi-abierto, abierto y preventivos, a pesar de ser un centro diseñado, en principio, para presos en régimen cerrado. Aunque teóricamente destinada a la reclusión de adultos, ocasionalmente admite menores de edad. Asimismo, a pesar de ser un presidio masculino, suele acoger un reducido número de internas. El centro está diseñado, en principio, para acoger a 93 internos (4 internos por celda).

El número de internos en el momento de iniciar el diagnóstico fluctuaba entre 216 y 220 (7-8 internos por celda), de los cuales unos 210 eran hombres y 6 eran mujeres. El 85 por ciento de la población reclusa se hallaba en régimen cerrado.

Como datos más significativos de esta población destacan:

53 por ciento: delitos contra la propiedad.

18,18 por ciento: homicidio.

14,76 por ciento: delitos contra la libertad sexual.

El 47 por ciento llevaba recluido un tiempo superior a los dos años.

El 12 por ciento llevaba recluido un tiempo superior a los cinco años.

El 25 por ciento carecían de asistencia jurídica.

La población de reclusos, de acuerdo a la legislación estatal, contaba con tres representantes electos encargados de canalizar las reivindicaciones de su colectivo

Características de la plantilla de la institución

La institución contaba con 18 funcionarios de vigilancia (3 mujeres y 15 hombres), una psicóloga y una asistente social a tiempo parcial, así como una abogada.

Actividades realizadas por los reclusos

Los reclusos disponían de un horario de patio de 3 horas diarias (2 por la mañana y una por la tarde), permaneciendo el resto del tiempo (es decir, 21 horas diarias) recluidos en sus celdas.

Las únicas actividades a las que tenían acceso eran:

Los presos en régimen cerrado podían asistir voluntariamente a las clases de alfabetización y enseñanza primaria que tenían lugar por las mañanas. Un 15 por ciento de los reclusos asistía a estas aulas.

Los presos en régimen semi-abierto tenían que prestar servicio obligatoriamente en la huerta situada en el área circundante del edificio.

La institución ofrecía a un número limitado de presos, puestos de trabajo válidos para la reducción de condena (a razón de 1 día de remisión por cada 3 días trabajados); el 23 por ciento de los presos accedía a estos trabajos. Además, un 17 por ciento de los presos realizaba trabajo en su celda por iniciativa propia, obteniendo también por ello reducción de condena. Finalmente, un 60 por ciento de los presos no realizaban ningún trabajo ni tenían derecho a reducción de condena.

Servicios ofrecidos a la población de reclusos

Asistencia sanitaria: 1 médico voluntario con media hora de atención semanal y 1 recluso, sin formación específica, que realizaba labores de enfermero. Los organismos sanitarios proporcionaban a la institución medicamentos de forma esporádica y en discordancia con las necesidades reales de la misma.

Asistencia jurídica: 1 abogada a tiempo completo encargada de la asistencia a los presos sin apoyo jurídico y de los diversos trámites legales relativos a la institución.

Asistencia social: 1 asistente social dedicada prioritariamente a la realización de exámenes de clasificación y emisión de informes, así como al apoyo en la realización de diversas gestiones solicitadas por los internos.

Asistencia psicológica: 1 psicóloga dedicada prioritariamente a la realización de exámenes de clasificación y emisión de informes, y a la atención clínica individual a un número de 10-15 internos.

 

IV. DISEÑO E IMPLANTACION DEL PROGRAMA

Una vez detectadas las necesidades de la institución, se realizó una evaluación de las mismas en función de los recursos disponibles y de las exigencias de funcionamiento interno del centro. Basándonos en lo anterior, se establecieron los objetivos del programa de intervención psicosocial. 

IV. 1. Objetivos generales del programa

Revertir la degradación producida por el medio carcelario en todas las poblaciones implicadas en el proceso.

Potenciar el desarrollo de capacidades y habilidades que permitan a las poblaciones implicadas la convivencia saludable en sociedad.

Concienciar a la comunidad local del proceso de génesis de la desadaptación social y de la realidad de las instituciones carcelarias

Consolidar la Cárcel Municipal de Pelotas como campo permanente de prácticas para la población universitaria.

IV.2. Objetivos específicos del programa

Area jurídica

Asesorar a los representantes oficiales de los internos en la recogida, organización y canalización de las reivindicaciones de la población carcelaria.

Agilizar los trámites jurídicos que competen a la institución.

Area educativa

Formar para la prevención de los problemas de salud a los que están más expuestos a las poblaciones de internos y funcionarios.

Dotar a la institución de un programa educativo que abarque la enseñanza primaria y secundaria, y la formación profesional.

Aumentar la dotación de material didáctico en la institución y/o el acceso al mismo.

Area de animación sociocultural

Dotar a la institución de un programa permanente de animación sociocultural destinado a las poblaciones de reclusos y funcionarios.

Area sanitaria

Mejorar la infraestructura material sanitaria de la institución.

Dotar a la institución de un sistema de atención médica permanente adecuado a sus necesidades.

Area psicosocial

Dotar a la institución de un equipo permanente de apoyo psicológico a la rehabilitación.

Dotar a la institución de un sistema de atención psicólogica individualizada permanente dirigido a reclusos y funcionarios.

Dotar a la institución de un sistema de apoyo psicológico a los reclusos recién ingresados.

Ampliar el ámbito de actuación del área de servicio social.

Area laboral

Ampliar el número de puestos de trabajo con derecho a reducción de condena ofrecidos por la institución.

Area de relaciones con la comunidad

Divulgar en la comunidad local la situación específica de la institución.

Aumentar la participación de la comunidad local en el funcionamiento de la institución.

Promover la creación del Consejo Comunitario, destinado a obtener y canalizar recursos materiales y humanos para un mejor funcionamiento de la institución.

 

IV.3 Metodología utilizada

IV.31 Equipo interdisciplinar de intervención penitenciaria

 

Se creó un equipo-base de intervención formado por:

El director del proyecto -psicopedagoga.

Los coordinadores técnicos de la intervención -psicóloga y médico-psicólogo.

Técnicos ayudantes -asistente social y psicóloga.

Alumnos de las facultades de psicología y servicio social

Posteriormente, se incorporaron al equipo de intervención, estudiantes voluntarios pertenecientes a las áreas de educación artística, ingeniería agrónoma, historia y filosofía.

Todos los estudiantes, tanto los del equipo-base como los voluntarios, pasaron por un proceso de formación y capacitación para el trabajo en instituciones penitenciarias, mediante clases teóricas, seminarios, talleres y análisis bibliográfico, bajo la dirección de los coordinadores técnicos del proyecto.

Durante las diferentes fases del desarrollo de la intervención, el equipo-base realizó de modo continuo reuniones exhaustivas de supervisión, evaluación y coordinación del trabajo. Asimismo, los profesores universitarios de las materias involucradas en el programa, realizaron supervisiones individuales de las prácticas llevadas a cabo en la cárcel

IV.3.2. Programa regular de actividades dentro de la institución

1. Actividades directamente ejecutadas por el equipo de intervención:

Programa de apoyo a la resocialización para presos en régimen cerrado. Técnicas utilizadas: dinámicas de animación sociocultural, técnicas de relajación, roletaking, educación para la salud.

Programa de apoyo a la resocialización para presos en régimen semi-abierto. Técnicas utilizadas: desarrollo de una huerta comunitaria, dinámicas de animación sociocultural, técnicas de relajación, role-taking, educación para la salud.

Programa de apoyo a los internos recién ingresados. Técnicas utilizadas: relajación, intervención en crisis, grupos de auto-ayuda.

Programa de apoyo a los representantes oficiales de los presos. Técnica utilizada: counceling.

Programa de apoyo a los funcionarios de vigilancia penitenciaria. Técnicas utilizadas: actividades recreativas dentro y fuera de la institución, relajación, counceling.

Programa escolar de enseñanza primaria y secundaria.

Programa de ampliación de la oferta del área de servicio social. Técnicas utilizadas: entrevista, visitas domiciliarias, asesoría a las familias de los reclusos

2. Actividades cuya implantación fue gestionada por el equipo de intervención:

Programa de actividades deportivas para presos en régimen cerrado.

Programa de cursos de formación profesional.

 

IV.3.3. Actividades esporádicas realizadas dentro de la institución

Jornadas de Educación para la Salud destinadas a los internos, los familiares de los mismos y los funcionarios penitenciarios. Técnicas utilizadas: conferencias, talleres, vídeo-fórum, asesoría, reparto de material de divulgación.

Fiestas destinadas a los presos y sus familiares -participación de grupos voluntarios externos a la institución.

Torneos de fútbol entre equipos de reclusos y equipos de la comunidad local

Vídeo-fórum y conferencias destinadas a los reclusos.

IV.3.4. Actividades de formación específica para los funcionarios penitenciarios

- Organización y coordinación del Ciclo de conferencias y seminarios "S.O.S. Presidio", fórum de formación y debate destinado a funcionarios penitenciarios de toda la región, profesionales, estudiantes universitarios y voluntarios. En él participaron, como ponentes, técnicos de las áreas de psicología y servicio social, autoridades estatales del área penitenciaria, directores de establecimientos penales, funcionarios y personalidades públicas de la comunidad.

IV.3.5. Relaciones con la institución

Se mantuvieron en todo momento los principios de claridad organizativa e informativa hacia los funcionarios y responsables de la institución, propiciándose la participación de los mismos en todas las fases del programa. Para ello, se realizaron reuniones semanales de evaluación entre los coordinadores técnicos del proyecto y la dirección del centro, así como reuniones mensuales de evaluación entre todo el equipo de intervención, funcionarios y dirección de la institución.

A su vez, se entrenó especialmente a los miembros del equipo en las habilidades para la relación con los funcionarios con vistas a disminuir la conflictividad usualmente generada por la intervención de personas ajenas a la institución penitenciaria. Asimismo, los coordinadores técnicos mantuvieron contactos con diferentes autoridades y técnicos del ámbito penitenciario estatal,

IV3.6. Relaciones con los internos

Durante el programa, se fomentó la participación de los internos en las siguientes tareas:

Determinación de las necesidades.

Establecimiento de prioridades.

Planificación y organización de las actividades.

Evaluación continua.

Para ello fue de especial relevancia la realización de reuniones semanales entre los representantes electos de los internos y los coordinadores técnicos del programa.

 

IV.3.7. Implicación de la comunidad local

Con vistas a lograr la progresiva concienciación de la comunidad local sobre la problemática específica de las instituciones penitenciarias y la implicación de diferentes colectivos en el proceso de readaptación social de los reclusos, se realizaron las siguientes actividades:

Divulgación en los medios de comunicación de la situación de la institución, de las diferentes etapas de la intervención y de los resultados obtenidos -prensa local, diferentes emisoras de radio local y vías de comunicación interna de la Universidad (UCPel).

Promoción de la participación comunitaria en las diferentes etapas de la intervención -campañas de donación de ropas y juguetes para los hijos de los internos, campañas de donación de productos alimenticios por parte de empresas locales para las fiestas de Navidad organizadas, campañas de recogida de material para los talleres de artesanía promovidas por el colectivo universitario.

Gestiones para promover la colaboración efectiva de las diferentes instituciones públicas vinculadas legalmente a la Cárcel Municipal de Pelotas, para cubrir las necesidades básicas de la misma

Promoción de la participación de personalidades públicas locales en los diferentes actos organizados en la institución.

Charlas informativas a grupos de universitarios no implicados en la intervención.

 

V. EVALUACION DE LOS RESULTADOS

V.1 Actividades realizadas e índice de participación en las mismas.

V.2 Objetivos alcanzados

VI. CONCLUSIONES

De los datos obtenidos en la evaluación del programa, subrayaremos varios aspectos a tener en cuenta para la continuidad del mismo, a pesar de no tratarse de los resultados objetivos de una evaluación cuantitativa.

1. El objetivo primordial de esta intervención era el de conseguir implantar un programa consolidado de intervención psicosocial en la Cárcel Municipal de la ciudad. Habida cuenta de que, al iniciarse el proceso de diagnostico, la situación del centro era la descrita en el capítulo de Análisis de Necesidades, podemos considerar la intervención como elemento favorecedor del cambio hacia una situación más positiva que la que existía con anterioridad. En un momento posterior se hará necesario el desarrollo de sistemas de evaluación más específicos destinados a evaluar objetivamente los efectos producidos por el programa en las poblaciones implicadas.

2. Asimismo, la puesta en marcha de todo el proceso, supuso la forma oficial de un convenio de colaboración entre la Cárcel Municipal de Pelotas y la UCPel, estableciéndose la Universidad como fuente de recursos humanos y organizacionales para la cárcel, y el centro penitenciario como campo permanente de prácticas para diferentes colectivos de alumnos universitarios.

3. A través de la aplicación de técnicas de evaluación cualitativa, se observó una tendencia positiva en el clima general de la institución, en la medida en que tanto presos como funcionarios expresaron el aumento de su grado de satisfacción con el entorno y de que el sistema de relaciones entre los diferentes colectivos del centro mejoró.

4. La intervención en su conjunto supuso el establecimiento de las líneas de actuación a seguir por los responsables del programa, así como por los colectivos internos o externos al centro implicados en el proceso de intervención; de esta manera, se aseguró la continuidad del programa.

BIBLIOGRAFIA