DOSSIER

Inserción sociolaboral
Work and social insertion

 

La relación de los individuos con el mundo del trabajo es un referente obligado a la hora de hablar de integración social. La población en edad de actividad laboral encuentra en el empleo, ya no solo una fuente de ingresos que le permita una mayor o menor independencia y sostenimiento vital, sino, de forma igualmente importante, el origen de toda una red de relaciones sociales normalizadas que le facilita la integración social como ciudadano de pleno derecho de nuestra sociedad.

Las altas tasas de desempleo en nuestro país, distribuidas de forma desigual entre distintos colectivos de población, llevan a que un importante número de sujetos víctimas de una exclusión social que comienza por la ausencia de trabajo. Es tema, así como sus repercusiones asociadas, vienen siendo tratadas desde hace tiempo por las distintas áreas sociales de las administraciones, bien con el diseño de acciones dirigidas a colectivos, jóvenes, mujeres, minusválidos, mayores de 55 años y parados de larga duración, principalmente) bien encaminadas a dotar de unos mínimos instrumentales a una población carente de recursos mínimos de subsistencia (salarios sociales, ingresos mínimos de integración, etc.).

Por este motivo, el Consejo de Redacción de la Revista ha creído importante hacer un dossier dedicado a la inserción sociolaboral. Para ello contamos con dos artículos. Uno de carácter generalista de Aramburu-Zabala y Fernández, donde se hace un análisis de las diferentes redes de atención que tiene objetivo los desempleados, planteando una necesidad de cualificación de personal, proponiendo, por último, la necesidad de intervenciones próximas al ciudadano desde un nivel local y comunitario.

De Lorenzo plantea, en el segundo artículo la necesidad de un cambio en la política de formación y empleo dirigido a uno de los colectivos mencionados, las personas con minusvalías. Señala el autor la importancia de cumplir el marco normativo existente, así como de desarrollar más sus posibilidades. Comenta, igualmente, la necesaria implicación de toda la sociedad a través de los distintos interlocutores existentes, haciendo especial hincapié en la necesidad de una formación adecuada para el colectivo.

Somos conscientes de que con estos artículos no agotamos todos los análisis que el tema requiere, por lo que, a la espera de un nuevo dossier monográfico, invitamos a los lectores a que nos envíen su experiencia y reflexiones al respecto.